Las infecciones de sífilis, gonorrea y clamidia han alcanzado cifras récord y están aumentando en los condados de King, Pierce y Snohomish, especialmente entre los hombres gay y bisexuales. Los casos de neurosífilis (sífilis sin tratamiento que ha llegado al cerebro) también siguen aumentando y aún ocurren nuevas infecciones de VIH.

Sin embargo, hay varias maneras de protegerse de estas enfermedades de transmisión sexual (ETS), sin dejar de tener una vida sexual placentera y saludable.

 

Condones

Los condones son una de las maneras más efectivas de prevenir el VIH y la mayoría de las ETS.  Úsalos regularmente y correctamente durante el sexo oral, anal o vaginal. No todos los condones son iguales. Vienen en diferentes tamaños, formas, texturas y materiales. Encontrar y usar un condón (u otro método de barrera como barrera dental de látex) que es adecuado para ti podría aumentar el placer sexual y mantenerte seguro al mismo tiempo.​

PrEP

PrEP, o profilaxis previa a la exposición, es una píldora que se toma todos los días si eres VIH negativo para reducir el riesgo de infección de VIH. PrEP no te protegerá contra cualquier otra ETS.  La píldora funciona mejor en combinación con otros métodos de prevención contra el VIH, como los condones.​

Presta atención a los síntomas

A menudo, el VIH y otras infecciones de ETS no muestran señales ni síntomas, o tienen síntomas parecidos a la gripe. En los casos que presentan síntomas, a menudo estos son protuberancias o sarpullidos en los genitales, descarga, molestia, comezón o dolor al orinar. Los primeros síntomas de una infección de VIH (VIH agudo) pueden ser fiebre, erupción cutánea, hinchazón de los ganglios linfáticos u otros síntomas similares a los de la gripe. Los síntomas de neurosífilis pueden ser zumbido en los oídos, pérdida de audición, o cambios de visión.  Aunque una infección no presente síntomas, puede tener efectos duraderos o irreversibles si no es tratada. Si notas algo, no lo ignores o esperes que se vaya. La mayoría de las ETS pueden ser tratadas o curadas fácilmente, lo cual prevendrá que las transmitas a otras personas.

Pruebas y tratamiento 

Las pruebas son la única manera de saber con certeza si tienes VIH u otra ETS. En la mayoría de los casos el proceso es rápido y fácil y puede implicar un hisopo o proporcionar una muestra de sangre o de orine. Lo mejor es hacerte las pruebas cada 3 meses o cada vez que pienses que tienes síntomas de una ETS, o si una pareja sexual te ha dicho que estuviste expuesto a una ETS. Si pruebas positivo, es muy importante que completes cualquier tratamiento que se te prescriba. Cuanto más tiempo dejes una ETS sin tratarla, más daño puede hacerte - no sólo a tu propia salud, sino también a la salud de tus parejas.

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